El radio Simsom recogido no ocupa apenas nada.La rosca del radio en la cabecilla es muy larga para poder prepararlo para distintas medidas de llanta.
Los radios Simsom de emergencia son ese tipo de cosas que casi nadie conoce y que sin embargo son un invento genial.
¿Cuantas veces ha ocurrido que se ha roto un radio de una rueda?
Pues segúramente alguna vez nos ha sucedido eso.Y el típico descentrado de la rueda y muchas veces asociado a un roce con las zapatas de freno.
La solución rápida que he visto tantas veces es abrir las levas de freno correspondientes quedando así sin freno...
Otra solución es con la herramienta y maña compensar el descentrado con los radios que están a los lados del roto.Es algo complicado esto pero si se puede apañar medio bien con un poco de suerte.
Todas estas soluciones pasan por ser provisionales,como vulgármente se dice para tirar hasta casa.Pero;¿y si no estamos en disposición de reparar o muy lejos de algún lugar para hacerlo?.¿Quién lleva radios normales de la medida adecuada y las llaves para desmontar el casete?. Estos son precísamente los dos puntos que le dan sentido al radio Simsom.
Un radio normal lo habría que llevar como hace tiempo se llevaban pegados a un tubo del cuadro o escondidos dentro del tubo de la tija de sillín.
Un radio Simsom es un cable flexible de acero con los dos topes rígidos y rosca larga en una de las partes.El problema del espacio está solucionado porque recogido no ocupa nada.
Y esa misma capacidad de flexibilidad y en especial el codo de acero curvado vá a hacer que lo podamos montar en cualquiera de los agujeros del buje incluso sin tener que desmontar el piñón en el trasero.
Lo complicado a veces dado el caso sería sacar el radio viejo roto de su alojamiento,la solución pasaría en lógica por doblarlo e incluso romperlo.
