Y aquí está;hay que tirar unas cuantas veces para que el aceite vaya saliendo por el circuito,al principio mezclado con alguna burbuja de aire incluso como se ve en la foto.Un bombeo produce un avance de aceite suficiente para gotear pausadamente de 20 segundos a un minuto según Rohloff.
El líquido sale del circuito por un agujero mínimo que está en la pieza pegada a la roldana y la distancia con esta es tan pequeña que la gota pasa directa a impregnar los dientes de la polea.La zona buena de contacto de la cadena es esa y de inmediato el lubricante pasa a repartirse por toda la transmisión,tanto si pedaleamos hacia delante o atrás.
Ya instalado,nos disponemos a cargar el depósito,un poco,roscar la tapa y bombear para que el aceite vaya pasando,de esa forma evitamos que el depósito rebose de forma prematura.Ya cuando se vea aceite en la manguera rellenamos de nuevo.
Un par de curvas de manguera con la holgura suficiente para que el cambio pueda estirarse sin inconveniente.Y finalizar con la pieza que va sujeta al eje de la roldana inferior.
El sistema montado en el tirante de la bici.Importante según las instrucciones que la inclinación del depósito no supere los 45º,según pude comprobar la verticalidad favorece el goteo incontrolado simplemente por efecto de la gravedad.
La verdadera razón de toda esta parafernalia es tener autonomía de lubricante sobre la marcha.Rutas de muchas horas o largos viajes de varios días son excelentes bancos de pruebas para el Rohloff,también y como tantas veces ocurre en rutas con mucho polvo o barro que se castiga la cadena en exceso,llegando al final con chillidos incluso en las roldanas.
El interior se asemeja de manera asombrosa al de muchos bolígrafos.Incluso en la parte de la punta lleva una bola con un muelle.El material es 100% metálico,predominando el aluminio. La espiga con el muelle grande es la que va roscada en su tramo final al tapón trasero de depósito.Al tirar del tapón hacia atrás la varilla de espiga retrocede por por dentro de la unidad central que está cargada de aceite y al soltar el tapón el efecto muelle bombea el fluido empujándolo hacia el exterior de una manera controlada por la bola del puntero.
Esta tapa va roscada a la varilla interna,soltando queda el agujero del depósito en el que habrá que echar el aceite.
Este dispensador de lubricante para la cadena Rohloff es seguro uno de los artículos más desconocidos para muchos.Yo tenía grabado en la memoria el haber visto este artilugio en la bici de un corredor en una carrera de MTB que se celebró en Asturias en un verano de hace mil años.Puede que en 1993 o 94.
Y el invento es muy ingenioso,aparte que como suele ser de acostumbrar en Rohloff la calidad de construcción y diseño de las piezas es exquisito.
Podemos decir que la unidad principal,tiene un funcionamiento similar a un bolígrafo,con la diferencia que en su interior hay aceite en vez de tinta.
Después tenemos una manguera que se une a un terminal y para completar montamos unas roldanas que se suministran con el kit con sus correspondientes separadores y bridas.
Como es lógico,recomienda el lubricante de la propia Rohloff,es de una alta densidad y habrá que ver el resultado en la época invernal que ahora afrontamos.
Se permite el uso de aceites menos densos que pueden ir bien en determinadas épocas del año o condiciones,aunque es necesario instalar un dispensador de fluido de la propia Rohloff para moderar el goteo entonces.
