Con el Wolber se evita sobre todo el pinchazo por pellizco que suele suceder con las llantas tradicionales y cámara normal.
El fondo especial de la llanta Wolber y las características de la composición del tubular hacen que el pinchazo por llantazo sea improbable.
El tubular se complementa con un bote de líquido de reparación de pinchazos.
Esta operación se realiza introduciendo desde el bote el líquido por la válvula del tubular y sin tener que desmontarlo.
La llanta TR-1 tiene un interior liso especial para que encolando la superficie con pegamento para tubulares el Avoriaz se adapte a la perfección.Es obligatorio pegar el tubular a la llanta para rodar con el.
Necesita de la llanta especial Wolber TR-1 para ser montado.
El peso del tubular Avoriaz se queda en 750gr.Buen peso comparado con cubierta convencional más cámara.
El Tubular está totálmente cerrado y sellado en su perímetro.
La válvula tipo presta algo más alta que si comparamos con una cámara de mtb tradicional con el mismo tipo de válvula.
El tubular Wolber Avoriaz presenta un balón moderado de unos teóricos 1,90".
Una vez hinchado la sección en mm es de 45mm en anchura y 40mm de alto.
El dibujo es un tanto polivalente y no presenta tacos con aristas agresivas, aparte de un perfil redondeado.
En esta ocasión presento algo reálmente excepcional.
Mucho se ha hablado en los tiempos modernos de los tubeless para mtb.Y es ya un hecho el que se hayan establecido como algo habitual.
Aparte y para no confundir está una pequeñísima porción de mercado que ocupan los tubulares para mtb.Destinados prácticamente a la élite más absoluta o a determinados sectores de competición como el ciclocross.
Pero echando el tiempo muy atrás nos asentamos en el año 1991 cuando la marca francesa Wolber saca al mercado lo que fué el primer sistema completo de tubular para mtb de la historia.
La denominación es la de tubeless,aunque solo coincide en el nombre con los tubeless de hoy en día.
Y es que reálmente el Wolber es un tubular a la antigua.Como los de carretera,pero adaptado a la lógica de la montaña.
